Monday, July 09, 2007

Cuando la bienvenida es dulce

Estamos entre los 35 y los 40 grados.
Las abejas zumban.
Los álbumes de fotos vuelan, los abrazos, las prisas porque hay que ver a mucha más gente, antes de que caiga el sol.
Pero siempre hay tiempo para el deleite, siempre hay tiempo para una sonrisa de complicidad. Que sé que os encanta...


6 comments:

Imogen said...

Y yo me alegro un montón de verte de nuevo por aquí pero...no soporto lo que hay en la foto. Ayyyyyy, que mal rollito me entra solo de pensar en el gusto que tiene

Anonymous said...

a este paso, de aquí a nada le haces el reportaje gráfico a un libro del Arguiñano....jajaja XD ;P

Rebienvenida, wapa :D

( no me gusta nada la miel, por cierto :P )

Neil said...

Ya pensaba que tu familia te había raptado, alguien te tiene que dar una super noticia pero dice que no logra hablar contigo, si te pica la curiosidad llámame, prometo que es un notición de los buenos y alegres.
Muchos besitos

Anonymous said...

No soy muy aficionada a la miel tampoco pero eso así, tan natural, no se ve todos los días.

Estoy tan contenta con mis 18º.

Tómate la vuelta con calma. ;)

haujavi said...

Dios, que asco, no me gusta tampoco la miel y menos los enjambres, qué malos recuerdos del ataque de abejas a la fachada de mi casa el año pasado...

k. said...

¿Ataque de abejas? Madre mía, ¿hubo alguna baja? Suena a peli de terror...

A mí la miel nunca me ha gustado especialmente, o me disgustaba, a épocas. Pero lo que he probado aquí me ha hecho cambiar de opinión. El sabor de la miel recién sacada de la colmena, con oxígeno, con cerumen (que acabas escupiendo), casi transparente.

Pero todavía mejor, la miel cristalizada (la que probé la habían traído de Ucrania). Tiene el aspecto de la grasa solidificada, el mismo color blancuzco, y tienes que escarbar con la cuchara, como si fuera una tarrina de helado congelado.

Mmmm... De las cosas más deliciosas que he probado en mi vida.