Saturday, July 29, 2006

Srebrenica, 11 de julio


Celebraciones. Gente reuniéndose, contando algún chiste, comiendo en un picnic. Gente muy real. Gente con familias con las que compartir el día. Con amigos. Con otra gente que también tiene familia y amigos. Personas con una fecha de nacimiento, cumpleaños, bodas, celebraciones.




Y otra vez, el sinsentido.








1.937 enterrados. 505 que se unen. Alrededor de 5.000 que todavía esperan. Y un hermano, un padre, una esposa, un hijo, que también esperan.

El vacío.
Fábrica de Potocari, cruzando la carretera desde el memorial, donde fueron retenidos lo que no escaparon y fueron cazados monte a través, en la escapada hacia Tuzla.





No olvidamos. Never forget.


Y los otros cientos de miles, los que no cayeron en Srebrenica y no se llevan los focos ni la atención de nadie. Tampoco en Srebrenica hubo una gran representación de autoridades este año. La vergüenza y el desinterés se alargan como una sombra también en un día de sol como éste, un día del mes de julio. Un día como tantos otros.

Se me pasó decirlo. Las fotos son de Alis, mi intérprete infatigable. Yo no pude estar allí, porque estaba precisamente en una de esas celebraciones de las que hablaba, en España.